¿Qué es la altitud y cómo se calcula?
Hablamos de «altitud» para referirnos a la distancia vertical que existe entre un punto cualquiera de la superficie o de la atmósfera, y el nivel medio del mar. Se calcula con un instrumento llamado «altímetro» y se expresa en metros sobre el nivel del mar (m.s.n.m).
Como el nivel del mar varía constantemente (por las mareas, el oleaje y otros fenómenos meteorológicos), para el cálculo de la altitud se toma de referencia un nivel promedio, que se puede considerar estable. Para obtener dicho valor, se utiliza un mareógrafo, que registra las variaciones del nivel del mar a lo largo del tiempo.
Por otra parte, cada país utiliza un valor distinto para el nivel medio del mar. Pero, en términos prácticos, la diferencia es casi insignificante.
La altitud se representa en los mapas mediante las líneas conocidas como “curvas de nivel”, que unen puntos ubicados a una misma distancia vertical respecto al nivel medio del mar.
Factores afectados por la altitud
Los cambios de altitud influyen en la presión atmosférica y la temperatura del aire. En general, a mayor altura, menor es el valor de estas variables.
En el caso de la presión, el decaimiento con la altura se da en todos los casos. Pero la temperatura no siempre se comporta de esta manera, ya que, en ciertas ocasiones, puede darse el fenómeno de “inversión térmica”, donde la temperatura aumenta con la altura en los primeros niveles. Esto puede ocurrir en situaciones de mucha estabilidad atmosférica.
Por otra parte, la concentración de oxígeno también decrece con la altitud. Esto explica los mareos conocidos como “mal de altura”, que experimentan las personas en zonas muy altas.